¡Nos encanta el verano! No hay nada mejor que un clima cálido y soleado, especialmente mientras descubrimos nuevas ciudades o estamos en el estranjero saboreando un fabuloso cocktail. Pero a veces esa sensación de despreocupación se vuelve bastante angustiante cuando nuestros zapatos o sandalias favoritas (posiblemente caras) se rompen. Pero no te preocupes, puedes solucionarlo de inmediato! Te ofrecemos una lista de pequeñas reparaciones que te ayudaran a evitar algunos problema con tu calzado.
1. Repara tus zapatos
Casi todos tenemos un par de sandalias, chanclas o zapatillas que usamos constantemente durante el verano. Naturalmente las suelas se gastan, lo que puede causar incomodidad y estropean el calzado haciendo que no podamos llevarlos más tiempo. En el peor de los casos, el desgaste podría causar algún agujero en las suela de los zapatos.
Dependiendo del tipo de material, nuestros profesionales en tienda pueden cambiar las suelas y tapas desgastadas, reparar y proteger las zonas afectadas. Incluso colocar nuevas plantillas puede ser una buena solución en el caso que tus plantillas se despegaran o estuvieran deformadas. Para obtener los mejores resultados, no dejes pasar demasiado tiempo para hacer estas reparaciones.